¿ Quién dice que no está al tanto de la crónica social ?.
Hoy es muy difícil mantenerse al margen de estas noticias. Sería necesario vivir en la estepa rusa o en el desierto de Atacama, por decir algo.
Las redes sociales, los medios informativos mas tradicionales o cualquier soporte por sencillo que sea, nos ponen al cabo de la calle de todo.
Fulanito, Menganita, Zutanito. ! Me encanta !.
No tengo ningún problema en confesar que lo que mas me entretiene es la revista de toda la vida. Esa que cuando niña, esperabas a que te llevaran a la peluquería, para poder ver. Esa que te acercaba de puntillas a la fascinante vida de las estrellas del momento, por supuesto para ti desconocidas, pero que sabías que era fascinante, sólo por ver las fotografías.
Yo tenia mi preferida y como no estoy ni en Chile, ni en el Cáucaso, hoy la sigo teniendo.
Aún con los años, cuando el momento se hace oportuno, la busco y sigo mirando sus fotos.
Me refiero al papel cuché, a la crónica rosa, a la prensa del corazón. Al " colorín ", como decimos en casa.
Todavía guarda mi madre alguna revista de aquellas y que seguimos mirando junto a un café, con la misma expectación que recién llegada del quiosco.
He de confesar que yo también tengo alguna reliquia digna de mención.
Pues bueno, el otro día en uno de los últimos " showrooms " de temporada, encontré esto ...
Me encantó.
Absolutamente fascinada, como cuando miraba las revistas de pequeña.
Tenia que quedarme con él. No podía pasarlo por alto.
Era divertido, atrevido, presuntuoso y muy fácil de llevar.
Esta claro " La Prensa Rosa ",
non solo è solo da leggere.
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